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 | Por Steve and Bridget Patton

Él dice: No quiero pasar todo mi tiempo libre con esta pareja

La mejor amiga de Mónica regresó a la ciudad. Ella está bien, pero su esposo es un idiota.

 

Ella dice: No es como si tuviéramos un montón de otros amigos.

Estoy de acuerdo en que su esposo no es muy agradable, pero Joel está haciendo un gran problema de esto.


En ninguna parte está escrito que una vez que están casados tengan que hacer todo juntos como pareja. Claro, puede ser agradable disfrutar de la amistad de otras parejas, pero también es agradable e incluso importante para su salud mental tener sus propias amistades. Y cuando tienen tales amistades, no significa que su cónyuge tenga que ser amigo de los cónyuges de sus amigos.

Bien, entonces, ¿qué pasa si su amiga los invita a los dos a reunirse con ellos y ninguno de ustedes quiere pasar tiempo con su cónyuge? Ustedes tienen un par de opciones.

Primero, hay una evasión cortés. Mónica puede decir algo como: “Gracias por la invitación, pero realmente me gustaría un tiempo solo para chicas. ¿Por qué no salimos juntas tú y yo?”

Una segunda opción sería optar por la primera opción como su norma y ocasionalmente pasar tiempo con ellos. ¿Por qué? A menos que él sea realmente una presencia tóxica- en cuyo caso ambos deberán ser honestos sobre sus límites emocionales-, tal vez Dios lo ha puesto en su vida para que pueda mostrarle algo de Su amor y aceptación incondicionales. No piensen en sus amistades únicamente en términos de lo que obtendrá de ellas, sino también, y lo que es más importante, lo que puede dar a través de ellas. De hecho, es al dar de sí mismos a los demás, juntos, que Dios les dará: " Felices los misericordiosos, porque obtendrán misericordia". (Mt 5, 7)

Si ambos se sienten atraídos por la idea de entablar amistades agradables y solidarias con otras parejas, sepan que existe una gran variedad de redes de este tipo, tanto locales como virtuales. Búsquenlos, pero recuerden que su objetivo principal no debe ser solo divertirse. Más bien, debe ser para crecer y ayudar a otras parejas a convertirse en las parejas fuertes, generosas y amorosas que Dios hizo que ustedes fueran.


Steve y Bridget Patton tienen maestrías en teología y consejería, también sirven como ministros de vida familiar en la Diócesis de Sacramento.

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