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 | Por Hna. Guadalupe Flores

Llamados a servir Escuela de la Fe

La Constitución Dogmática, Lumen Gentium, nos dice que los laicos buscan formarse, para ayudar al “crecimiento de la Iglesia y a su perenne santificación” (no. 33). Esta es la base fundamental por la que los laicos deben formarse como cristianos ya que actúan en el mundo para realizar un servicio apostólico, para hacer presente a Cristo en el ambiente en el que se encuentran.

Por esta razón, la Diócesis de Charleston responde a esta exhortación a través de la Escuela de la Fe, “Cristo Maestro”, para dar una formación integral a todos los adultos de la comunidad Hispana de nuestra diócesis. Trabajamos con la ayuda de Dios, iluminados por el Espíritu Santo y guiados por el obispo, para que todos los participantes puedan formarse a través de un programa de catequesis sistemático, orgánico e integral con Cristo como nuestro maestro.

Este programa está basado en las Sagradas Escrituras, la Sagrada Tradición de la Iglesia Católica, expresada en el Catecismo de la Iglesia Católica, y otros documentos de la Iglesia. El objetivo es que los participantes contemplen y celebren el misterio pascual de Cristo, según sus necesidades espirituales. Los instructores en cada vicaría son personas que tienen títulos superiores en teología otorgados por una universidad, y también actúan como instructores nuestros sacerdotes, religiosos y diáconos.

Luego de todo lo anterior, tuve la gran dicha de acompañar y ser parte del segundo grupo de egresados de la Escuela de la Fe “Cristo Maestro”. La graduación se llevó a cabo el 14 de enero con 65 feligreses de la comunidad hispana de diferentes parroquias de nuestra diócesis. Concluyeron su formación en una hermosa celebración eucarística en la Capilla de la Sagrada Familia en el Centro Pastoral de Charleston.

El obispo Jacques Fabre-Jeune, CS, celebró la Misa con el concelebrante padre Peter E. Sousa, CSsR, y el diácono Carlos Marin. En su homilía, el obispo recordó a los graduados la importancia de la formación continua. Dijo que lo aprendido en este tiempo de formación lo deben poner en práctica en sus comunidades parroquiales, colaborando con sus sacerdotes.

El día de la graduación se podía percibir diferentes sentimientos que cada uno de ellos estaba experimentando. Estos son algunos de los testimonios que reflejan la experiencia de agradecimiento de todos nuestros egresados de la Escuela de la Fe “Cristo Maestro”:

José: Refiriéndose a la homilía del obispo dijo, “Me agradó que nos recalcara, que, al recibir nuestro diploma, no nos llenemos de soberbia y pensemos que ya somos unos teólogos y que merecemos un trato especial en nuestras comunidades. Sino que debemos llevar la alegría del Evangelio a nuestros hermanos y hermanas. ¡Fue el mejor día de mi vida!”

Jovita: “Para mí fue un día muy especial en el que me sentí bendecida, feliz y agradecida con Dios por permitirme perseverar y llegar a la meta final. Y ahora, con la ayuda de Dios, me toca poner en práctica lo que aprendí”. (St. James, Conway)

Jaime: “Mi experiencia en la Escuela de la Fe fue una bendición porque aprendí a valorar mi fe y a conocer más mi Iglesia. También ser un mejor cristiano, persona, esposo, padre e hijo y amigo”. (St. Mary Magdalene, Simpsonville)

Francisco y su esposa Concepción: completaron su formación por zoom desde Denver, Colorado. Por motivos de trabajo, tuvieron que mudarse a otro estado: “La Escuela de la Fe - Cristo Maestro ha sido una verdadera escuela para nosotros. Caminar junto a otros hermanos sedientos de la fe nos ha dejado grandes muestras de cariño. Aprendimos a iluminar nuestra inteligencia, vivir valores universales, compartir experiencias y sobre todo comprender que Cristo es nuestro Maestro, nos deja una gran tarea de ir evangelizando al prójimo, de ‘oler a oveja’, de dar la vida como Él nos ha enseñado”. (St. Francis by the Sea, Hilton Head Island)

Paulo: “Ha sido una experiencia muy enriquecedora conocer la tradición, historia y doctrina de nuestra Iglesia Católica a través de nuestros teólogos, religiosos, diáconos y sacerdotes. Ahora nos toca a nosotros compartir lo que hemos aprendido. Gracias a nuestra Diócesis de Charleston por brindar este medio de formación para nuestros vicarios que es accesible para todos”. (St. John of the Cross, Batesburg)

En su exhortación apostólica Evangelii gaudium (la Alegría del Evangelio), el Papa Francisco nos dice: “La formación de los laicos y la evangelización de los grupos profesionales e intelectuales constituyen un importante desafío pastoral”. Es nuestra misión estar en continua formación y enseñar a otros a ser buenos discípulos y seguidores de Cristo.


La hermana Guadalupe Flores, OLVM, es la coordinadora de Formación de Fe de Adultos para la oficina del Ministerio Hispano. Envíele un correo electrónico a gflores@charlestondiocese.org.