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 | Por Sheri Wohlfert

5 consejos para ayudar a los adolescentes con su primer trabajo

No creo que nadie argumente que criar adolescentes responsables, trabajadores y seguros de sí mismos sea una tarea noble y vital. Una de las formas en que los estudiantes de secundaria pueden desarrollar esas y muchas otras habilidades importantes es consiguiendo un trabajo de medio tiempo mientras están en la escuela secundaria. Pero debido a que equilibrar la familia, trabajo y escuela puede ser complicado, aquí hay algunos pensamientos para considerar.

Comience por el principio: siéntese con su hijo adolescente y analice los pros y contras de conseguir un trabajo. Obviamente, los primeros de la lista en el lado positivo incluirían desarrollar una sólida ética de trabajo, así como ganar confianza, dinero, responsabilidad y habilidades de comunicación. El lado negativo incluye menos tiempo para estudiar, actividades sociales y tiempo en familia, así como el estrés de la gestión del tiempo. Dado que la lista se verá diferente para cada niño, este es el momento para que exprese sus inquietudes o comparta pensamientos alentadores.

Examine el por qué: A veces hacemos lo correcto por la razón equivocada. Tener claro por qué ayudará a asegurar que la decisión sea buena. Si el motivo es ganar experiencia en un posible campo profesional, puede ser diferente a que si solo es para ganar dinero para gastar. Una buena combinación en esta área ayuda con el compromiso laboral y prepara a su hijo adolescente para hacer las preguntas correctas mientras busca un trabajo adecuado.

Sentar las bases: nuestra misión es ayudar a los niños a estar seguros, saludables y santos; así que antes de que acepten su primer trabajo, ayúdenlos a tener éxito estableciendo una estructura con esa misión en mente. Asegúrese de que el horario les permita asistir a Misa y participar en actividades basadas en la fe. Su primer “trabajo” en esta etapa de la vida es ser estudiante, así que tenga claras las expectativas académicas. Discuta la cantidad de horas que pueden trabajar, las veces que pueden estar disponibles y los eventos familiares que tienen prioridad. Los primeros trabajos no suelen ser glamorosos ni bien pagados, y a menudo implican hacer cosas de “chico nuevo” que no siempre son demasiado atractivas. Dedique un tiempo a hablar sobre cómo manejar eso, porque renunciar no es la mejor opción.

Compártalo: todas estas ideas y expectativas deben comunicarse al empleador. Es posible que necesite hacer un juego de roles en esta discusión, pero desarrollará grandes habilidades y traerá paz al proceso de equilibrar la escuela, trabajo y familia. Está bien perder o no conseguir un trabajo si no le permite a su adolescente mantener sus estudios y vida familiar como una prioridad.

Una cosa más: haga un poco de investigación sobre el lugar donde podría trabajar su adolescente. Tenemos que ser conscientes de las personas y lugares que influirán en ellos. Es muy importante hacer todo lo posible para asegurarnos de que nuestros hijos estén rodeados de personas y experiencias que los ayuden a convertirse en los santos que Dios quiere que sean. Tenga una conversación sobre el manejo de situaciones en el lugar de trabajo que puedan contradecir la fe, normas y creencias familiares.


Sheri Wohlfert es maestra de escuela católica, oradora, escritora y fundadora de Joyful Words Ministries. Sheri bloguea en www.joyfulwords.org.