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 | Por Cristina Sullivan

San Pedro Claver y esclavitud moderna

¿Qué habría podido significar para un esclavo africano del siglo 17 el hecho de que llegara un hombre blanco a decir que todos los seres humanos gozaban de la misma dignidad? Hoy en día, esa pregunta puede despertar en nosotros la respuesta: “significaba la anhelada libertad y el respeto por la propia dignidad”. 

Sin embargo, en ese momento histórico en el que la esclavitud era el sistema social establecido, pudo haber significado una utopía,que era mejor ignorar porque soñarla podría causar más decepción que luchar por ella. Pero hubo un hombre que entregó su vida y su vocación para que las comunidades de esclavos africanos abrazaran el más alto grado de dignidad: la realidad de ser hijos e hijas de Dios. 

Esa figura fue San Pedro Claver, quien 6 años después de haber sido ordenado sacerdote, tomó el voto perpetuo de ser el servidor de los esclavos africanos para siempre.

Este hombre nació en España a finales del siglo 16. Cuando tenía 30 años viajó a Colombia (que en ese momento se llamaba La Nueva Granada), y desde su ordenación como sacerdote se estableció en Cartagena de Indias. Por su ubicación geográfica, esta ciudad se convirtió en el principal centro de comercio de esclavos africanos, quienes después de desembarcar eran enviados a los diferentes territorios de las Américas. 

Cuando llegaban los barcos cargados de esclavos y debido a las condiciones infrahumanas en las que eran transportados, muchos arribaban con enfermedades, trastornos e incluso desfalleciendo. San Pedro se dedicó a recibirlos en el puerto y contaba con intérpretes de distintas lenguas africanas que le ayudaban a comprender la necesidad que tenían. Además de brindarles el alivio para sus enfermedades, se dedicó a compartirles la palabra de Dios, a evangelizarlos y bautizarlos. Se convirtió en el esclavo de los esclavos, y su entrega fue el primer eslabón en la lucha a favor de los derechos humanos. Por medio de su labor evangelizadora les confirió la mayor y más excelsa libertad: la de ser hijos de Dios.

El maltrato y la actitud racista de tratar a los esclavos como seres que no eran humanos creó una marcada división entre personas de las distintas razas. La entrega y el compromiso que San Pedro tuvo con las comunidades de esclavos africanos le hizo ganarse un lugar muy especial entre ellos, y era uno de los pocos blancos que podía ingresar a las comunidades africanas y ser bien recibido. En las crónicas que se tienen del santo, se cuenta que él pasaba mucho tiempo escuchando confesiones y que recibía primero a los esclavos; si le sobraba tiempo, recibía a los blancos. Esto causaba mucho malestar entre la comunidad blanca y fue motivo de quejas presentadas a sus superiores.

Pedro Claver no promulgó la abolición de la esclavitud. El no escribió contra la esclavitud ni la atacó abiertamente, pero sí la combatió con hechos. La fuerza de su acción, el impacto de sus obras de caridad y su entrega vocacional dentro de las comunidades de esclavos fueron el legado que lo llevó a ser nombrado el patrono de los derechos humanos. Su vida y testimonio ha sido una fuente histórica importante para la lucha a favor de la dignidad de toda vida humana. Su muerte sucedió el 8 de septiembre (fiesta del nacimiento de la Virgen María), y en el 9 de septiembre se celebra el día nacional de los derechos humanos en Colombia, en conmemoración a este personaje. 

¿Cómo se vive la esclavitud hoy en día? ¿Qué circunstancias menoscaban la dignidad de los seres humanos en el mundo en que vivimos hoy? Lamentablemente el tráfico humano sigue siendo una tragedia en la actualidad. Se trafican personas de múltiples nacionalidades, en especial menores de edad, para ser vendidos a la  industria  pornográfica o, más a menudo, como mano de obra sirvienta. Se estima que al año, 2 millones de niños y niñas son víctimas del tráfico humano y vendidos para ser explotados.

Paradójicamente en Cartagena de Indias, el mismo lugar en donde San Pedro se convirtió en un esclavo de los esclavos, es en donde han caído varias redes de tráfico humano y explotación sexual. Este año, la productora que realiza la serie The Chosen (Angel Studios), estrenó la película Sound of Freedom, la cual muestra un capítulo de esta realidad.

El llamado a proteger y defender los derechos humanos sigue siendo vigente. No es una tragedia que sucedió hace varios siglos, es un drama que sigue cobrando víctimas. La droga del siglo 21 es la pornografía, y el impacto que ésta genera a nivel colectivo es parte del gran problema que tenemos como sociedad. 

Informarnos con respecto a las secuelas que genera, fomentar la prevención de su consumo y buscar la ayuda adecuada en caso de haber desarrollado una adicción son cosas que podemos hacer desde cualquier lugar y en cualquier momento. Pidámosle a San Pedro Claver que nos muestre cómo podemos seguir defendiendo los derechos humanos en el mundo en que vivimos hoy. Somos parte indispensable de la solución. Las siguientes son algunas  fuentes recomendadas (de las muchas que están disponibles), para el estudio e información sobre este tema:

  • Fight the New Drug: una organización que tiene como objetivo disminuir la demanda de la explotación sexual a través de la educación, ayudando a las personas a tener una vida libre de los efectos nocivos de la pornografía. Visite su página oficial https://fightthenewdrug.org.
  • The Hardcore Truth: entrevista hecha por Matt Fradd a Donny Pauling, ex productor de la Playboy, en donde se desmantelan 10 mitos con respecto a la pornografía. Está disponible en internet, puede pedir el PDF gratis a fitnessemotional@gmail.com
  • Documental acerca de San Pedro Claver: se encuentra disponible en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=8Q5uD22KZKU

Cristina Umaña Sullivan es socióloga cultural que se ha dedicado a la evangelización por más de 10 años con especialidad en Teología del Cuerpo y creación de identidad desde la perspectiva cristiana. Envíele un correo electrónico a fitnessemotional@gmail.com.